AMBOS CANDIDATOS PUDIERON GANAR

RAJOY-RUBALCABA, HAY MATERIAS PARA LA PELEA
Es curioso y sorprendente que tres de los diarios que en mayor medida y con más entusiasmo dan su apoyo y respaldan la candidatura de Mariano Rajoy hayan destacado como primerísimo titular el “lapsus” del candidato rival, el socialista Rubalcaba: Rubalcaba da por hecho que Rajoy ganará las elecciones, dice El Mundo; Rubalcaba trata a Rajoy como presidente, dice ABC, y Rubalcaba da por ganador a Rajoy, titula La Gaceta… No hay duda de que es un modo de resolver una papeleta difícil, la que se planteó a la hora de determinar de parte de quién se había inclinado el debate. Pero, ¿fue ése el único momento relevante y el más decisivo del encuentro dialéctico? Puestos a buscar lapsus, el reiteradamente cometido por Rajoy de llamar Rodríguez Zapatero a Rubalcaba no fue menor…
En cualquier caso, el gran mitin se produjo en unas cuentas televisiones y parece que a gusto de los dos contendientes y de sus respectivos “fans”, que no tuvieron dificultad en vitorear como presidentes a sus correspondientes líderes, doce días antes de las urnas. En todo caso, parece claro que, como suele decirse, “hay partido” y hay elementos para poder asegurar que todavía está por ver el resultado final, tantas veces anticipado en las encuestas lectorales de manera unánime: Rajoy lleva muchos años de aspirante, y Rubalcaba sólo compite desde hace unos pocos meses, pero todo permite imaginar que tendremos una legislatura, la que dará comienzo en las próximas semanas, nada aburrida, y con ingredientes suficientes para averiguar que será movida y ajetreada, con un Gobierno y una Oposición decididos a no dejarse llevar por la rutina de las legislaturas anteriores. También quedó de manifiesto que hay una doble visión y una alternativa clara a la salida de la crisis: Rajoy se muestra decidido a seguir haciendo recortes de gastos públicos, frente a Rubalcaba, que niega que ésa sea la única salida y pretende simultanear control de gasto con incremento de ingresos públicos para que se facilite el acceso de muchos ciudadanos a empleos constituidos con recursos del Estado.
Luego, resultó también muy llamativa la ausencia de referencias a grandísimas cuestiones que han estado y están en la actualidad de cada día. Mucho dio de sí la pervivencia o extinción de las Diputaciones provinciales, pero ¿está demostrada la idoneidad del estado autonómico? Es evidente que es costoso, y que debiera tener mayor aprovechamiento. ¿Nadie espera, por ejemplo, y no cabe esperar que las CCAA creen empleo? Pues no estaría nada mal que no se limitaran a crear funcionarios públicos… ¿Qué sucederá con las Cajas de ahorros? ¿Qué futuro tienen las actuales Fuerzas Armadas, después de varios años de dedicación a resolver problemas “del mundo? ¿Por qué nadie –ninguno de los dos candidatos, en concreto-, quiso entrar a las pretensiones nacionalistas que vienen aireando en la campaña Durán y Erkoreka, de fueros para Cataluña y de avance en el autogobierno para Euskadi?
No es menos cierto que se quiso meter en un solo debate toda la abundante problemática de la vida española, tan abundante y diversa. Pero, para empezar, o como aperitivo, no estuvo nada mal. Hay ideas, a menudo enfrentadas, y hasta, ocasionalmente, hay propósitos de cooperación entre ambas partes para salir del atolladero de una vez por todas. Algo que se echó de menos en los últimos años de la legislatura que acabamos de cerrar…
Por lo demás, está por ver que un debate televisivo recomponga las previsiones de muchos meses de encuestas…