Rubalcaba empieza a irse Muchos de sus adversarios enmudecieron ayer, cuando Rubalcaba les dio la noticia de que empieza a irse de los cargos que ha venid9 ocupando en el PSOE durante las últimas décadas. Rubalcaba ha apelado a su propia responsabilidad para dar paso alas dos nuevas convocatorias: Congreso extraordinario en julio, y elecciones primarias en noviembre. Algunos discuten si no habría sido más conveniente el orden contrario, primarias primero. Decidido está por la actual organización, y están por ver sus resultados. Hay, además, otra pieza del partido con la que es preciso contar: Susana Díaz, presidenta del PSOE andaluz y presidenta de la Junta andaluza es probable que quiera decir algo en esta hora crítica para el partido, y desde su posición fuerte y clave deberá ser escuchada atentamente. Luego, otros barones, como Navarro en el PSC, o Patxi López en el PSE, que también parece probable que recurran a sendos congresos extraordinarios con los que superar el difícil momento que atraviesa del partido, salvo en Andalucía. En el otro lado, en el PP, tampoco están para hacer fiestas de celebración, aunque hayan ganado las elecciones. Pero el coste ha sido elevadísimo, y los barones reclaman rectificaciones, y sobre todo, reflexiones. Tal como han ido las cosas, es del todo previsible que el PP complete su derrota en las elecciones autonómicas y municipales, particularmente en Madrid: No Botella ni González han superado con holgura estas elecciones europeas que han dejado temblando a los dos grandes partidos hegemónicos, con pérdidas muy notables de votos. Es el tiempo de los pequeños. Las atenciones están puestas, en particular, en Podemos, con sus cinco escaños en el Parlamento de Estrasburgo, y sus primeras medidas extraordinarias: Recorte de sueldos hasta un tope de 1.900 euros mensuales, viajes en clase turista… Es la forma de combatir a los “partidos de la casta”, como insiste en llamar a PP y PSOE Pablo Iglesias. Y luego vendrán las alianzas con otros grupos, verosímilmente con Izquierda Unida, para continuar grupos propio en el Parlamento de Estrasburgo. Cada cual está sacando sus propias conclusiones y enseñanzas de unas urnas que no fueron benévolas para algunas siglas, y que han abierto las esperanzas de cambio para otras. Claro que los peor parados han sido los que ni siquiera han logrado escaño, como es el caso de José Elpidio Silva, el juez de Blesa, y de Vidal Cuadras, líder de Vox y durante las anteriores legislaturas todopoderoso vicepresidente del Parlamento Europeo, elegido en las filas del PP, partido del que “apostató”… ¿Y la ciudadanía? Los ciudadanos siguen sin creer al PP que ha venido proclamando el finadle la crisis y el comienzo de la recuperación económica. Los ciudadanos no la ven por parte alguna, y esperar a ver qué aportaciones nuevas traen los viejos y los nuevos partidos, y en qué medida se empezará a advertir el saneamiento de la política. Si alguna vez lo logra… JOSÉ CAVERO