Los penúltimos recortes autonómicos en Cataluña y Andalucía
Ante la “cumbre de presidentes autonómicos” que es la Conferencia sobre Política Fiscal y Financiera, convocada para este jueves, algunos Gobiernos autonómicos han anunciado sus “penúltimos recortes”, a la espera de recibir el visto bueno que les debe dar el ministro Montoro y su adjunto Beteta, los grandes revisores de las cuentas, que deben atenerse al sacrosanto objetivo de no superar el 1,5 por 100 anual de incremento de gastos. Como indica ABC, las reformas obligarán a casi todas las regiones a rebajar sus gastos de personal. Y recuerda que las CCAA se gastan actualmente, en su conjunto, 60.000 millones de euros al año sólo en nóminas. Según La Razón, algunas Comunidades no aprobarán en el cónclave de este jueves.. Lo cierto es que los Gobiernos andaluz y catalán han dedicado estos días previos a la cumbre autonómica a ajustar cuentas. Como titula El Mundo, Griñán y Mas se pliegan al plan de ajuste que exige Rajoy. Habla Expansión de “reunión clave bajo el fantasma del rescate”, y asegura que se analizará la asfixia financiera de las regiones y todos los planes de ajuste. Y asimismo, indica Cinco Días que las dos Comunidades más críticas con Rajoy aceptan rebajar el déficit al 1,5 por 100, bajando sueldos públicos y subiendo impuestos y tasas.. En concreto, ambos gobiernos regionales explicaron cómo afrontar este nuevo y obligatorio recorte: Como señala El País, Artur Mas clama contra la austeridad obsesiva de Rajoy. Dice El Mundo que Mas fía sus ajustes al decreto que Rajoy censuró y que la Generalitat culpa al Gobierno, a la UE y al tripartito de sus nuevos recortes. Mas, dice ABC, aborda su tercer recorte, de 1.500 millones, con otra rebaja de sueldos... El presidente catalán, explicó, en comparecencia pública, las medidas de este nuevo programa, sin desglosar las partidas, que incluye los siguientes puntos: la consolidación de la reducción del 5% en los complementos de los funcionarios anunciada ya en noviembre; el ajuste en determinadas empresas públicas a las que reducirá las transferencias; la lentificación o reprogramación de obras públicas; la venta de patrimonio, la congelación de nuevas convocatorias de subvenciones y nuevas tasas en la FP superior. La mayor parte de estas medidas estaban ya anunciadas e incluso presupuestadas, pero Mas ha incidido en ellas para transmitir confianza. Cataluña también aplicará los decretos de Sanidad y Educación impulsados por el Gobierno de Mariano Rajoy, aunque se planteaba recurrirlos. Las únicas medidas no anunciadas hasta ahora son la instauración de una tasa a los estudiantes de ciclos formativos de grado superior; la reducción de subvenciones y la reducción de transferencias a las empresas públicas, que ya se había iniciado en 2011 y ahora se acelerará. Con todo, el Ejecutivo de CiU no ha cuantificado ninguna de estas partidas. Se advierte que el Gobierno catalán ha entrado en una contradicción al anunciar que la mayor parte del ajuste vendrá del cumplimiento de los decretos de Sanidad y Educación del Gobierno central ya que hace tres semanas el Gobierno catalán aseguró que las medidas de estos decretos se quedaban cortas y que sólo permitían ahorrar 150 millones de euros en lugar de los 1.500 que calculaba el Gobierno central. Ahora, el discurso ha cambiado. Artur Mas ha dicho que ahora "toma la palabra" del Ejecutivo de Mariano Rajoy y que espera un ahorro muy superior. El consejero de Economía, Andreu Mas-Colell confía, eso sí, en que el Gobierno central tome nuevas medidas porque siguen existiendo serias dudas de que las actuales permitan el ahorro previsto. Mas ha abierto la puerta a una subida de impuestos el año próximo. El presidente ha encargado a Mas-Colell una propuesta para "maximizar" tasas, precios públicos e impuestos propios. Dentro de éstos podría estar el impuesto de sucesiones, que el tripartito redujo y el Gobierno de CiU prácticamente eliminó el año pasado. Ahora se plantean dar marcha atrás. En todo caso, observan los asistentes a la rueda de prensa que Mas mostró un enorme fastidio por tener que presentar un tercer plan de ajuste desde que accedió al poder en 2010. "Este plan nos viene impuesto por errores de otros", dijo al recordar que la Generalitat ya recortó, en 2011, 1.800 millones de euros y se convirtió en pionera en España de las medidas de austeridad. "Y hay que enviar este mensaje a la Unión Europea. La austeridad tiene que ser un valor pero no una obsesión", dijo... Mas también culpó al Gobierno de Zapatero por anunciarle que en 2012 Cataluña dispondría de 1.700 millones cuando, al final, esa suma no ha llegado a las arcas de la Generalitat. "O no lo calcularon o miraron hacia otro lado", explicó, y reprochó a Rajoy centrifugar el déficit a las comunidades autónomas. "Menos lecciones y más hacer los deberes", le ha afeado Mas al señalar que el Gobierno central no se aplica la misma medicina. "Por ejemplo, la Ley de la Dependencia subraya que Madrid y nosotros tenemos que invertir la misma suma en ese tema: pues bien, nosotros hemos invertido 900 millones y ellos, 200, y han recortado ayudas en centros especiales de trabajo, en programas de inmigración, ha anulado programas de guardería, en planes contra el sida, en proyectos culturales, en transporte público metropolitano y en investigación", subrayó. El Ejecutivo catalán recordó que ya ha recortado una media de entre el 5% y el 10% del sueldo a los funcionarios y ha congelado obras públicas, cuando el Gobierno central no se atreve a tocar el salario de los empleados públicos del Estado ni tampoco ha renunciado a obras del AVE ni ha extendido, como reclama, peajes en todas las autopistas españolas. Mas ha reivindicado el "esfuerzo gigantesco y titánico" que ha hecho desde que CiU llegó al poder en diciembre de 2010. "Nosotros nos encontramos con un déficit de 8.500 millones de déficit; en lugar del 2,4% era del 4,3%. Y en 2011, recortamos 1.850 millones y hemos reducido el déficit al 3,2% -3,7% según los cálculos de la Intervención General del Estado- pese a que pagamos 1.000 millones en intereses anuales y sin recibir el dinero de la disposición adicional tercera", añadió.
En cuanto a los presupuestos andaluces, destaca El País que Andalucía baja sueldos, sube impuestos y aplaza obras para no reducir servicios. Los 260.000 empleados de la Junta perderán tres mil euros de media al año. También se relata en la crónica de El Mundo: Andalucía sube los impuestos y recorta el sueldo a sus empleados hasta un 15 por 100. Indica La Razón que la Junta andaluza ajusta 3.500 millones tras alentar las protestas por los recortes del Gobierno... Por loo demás, según se asegura en El Confidencial, la urgencia del ministro Montoro porque las Comunidades Autónomas acaten los planes de ajuste dictados desde el Ministerio de Hacienda están abriendo heridas en las propias baronías del Partido Popular. Menciona al presidente extremeño, José Antonio Monago, o al valenciano, Alberto Fabra, que han exigido “menos frivolidades” a Madrid ante los rumores propalados de una posible intervención de sus correspondientes regiones. En concreto, menciona el malestar en la capital del Turia, del que dice que es generalizado y va más allá de la estructura oficial del Partido Popular. Buena parte de la élite empresarial afín a las tesis populares, o que al menos criticó públicamente la gestión del anterior Gobierno del PSOE, discrepa de la estrategia marcada desde el Palacio de La Moncloa y desde Hacienda, que cuestiona sus competencias políticas para poder cumplir con el objetivo de reducción del déficit que exige Bruselas. Varios de los barones del PP consideran que la corriente de opinión creada respecto a las Comunidades Autónomas puede volverse en contra del propio Gobierno. Además, la demonización del sistema autonómico carece de recompensas de puertas afuera, donde se percibe como primer y principal problema de España la reforma del sistema financiero. Además, en caso de existir la necesidad de revisar el modelo autonómico, desde las comunidades populares señaladas por Hacienda se insiste en abrir el debate a todas las regiones en lugar de estigmatizar sólo una parte, a pesar de que los problemas sean comunes, más allá de los niveles de déficit. En este sentido, algunos barones critican en voz baja el silencio que se extiende sobre la Comunidad de Madrid, que a finales de marzo afloró mil millones de déficit en sus cuentas de 2011, o sobre su Ayuntamiento, el más endeudado de España. También las cuentas de Asturias, donde prosigue el desacuerdo para formar gobierno entre FAC, PP y UPyD Estas tensiones dan lugar a situaciones tan contradictorias como la protagonizada por el propio Monago, que como presidente de Extremadura ha echado un capote a su homologo socialista Griñán, al que reconoce la voluntad de equilibrar las cuentas y reducir el déficit. A pesar de tener que recurrir todos a medidas similares, las comunidades autónomas amenazan con un frente común contra el centralismo de Madrid.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario