Los bastiones del PP en Madrid Coincidiendo con la celebración del dos de mayo en Madrid, el diario El País proporciona los datos de una encuesta, según los cuales, el PP está perdiendo, o ha perdido ya la hegemonía de la que viene disfrutando en Madrid desde hace mucho años. Veintiséis en el caso del ayuntamiento, desde que el caso Tamayazo permitió comprobar los irreprimibles deseos que doña Esperanza Aguirre por obtener esa plaza. Según esta encuesta de ahora, no sólo la alcaldía, que pasaría a ser de la izquierda nuevamente, terminado con el paréntesis de Ana Botella, vicaria y sucesora-sustituta de Gallardón- sino también la comunidad de Madrid, ahora en poder de Ignacio González, a su vez, sustituto y vicario de Esperanza Aguirre, se vería necesitada de apoyos externos, verosímilmente de UPyD, para consolidarse o modificarse. O sea, que los dos “sustitutos” o vicarios que ahora nos mandan, Botella y González, deberán espabilarse muy significativamente para no perder esas elecciones que ya se les dan por perdidas. Es sabido que la larga permanencia en los cargos de un mismo partido, suele ocasionar hartazgo y fatiga entre los electores, sobre todo cuando no hay grandes novedades, o cuando el ejerciente comete errores relevantes. De Botella todos recordaremos, siempre, su viaje al Spa de Lisboa cuando aún estaban tibios los cuerpos de las muchachas de la discoteca municipal madrileña. O su apuesta mundial por el Madrid olímpico… De Ignacio González será difícil olvidar su muy famoso ático de propiedad, durante mucho tiempo, ignorada u oculta, pero en todo caso sospechosa. En todo caso, va siendo hora de que alcalde y presidente sean designados por sus propios méritos, y no por delegación de otros antecesores. Mucho se ha hablado y escrito del fracking, como técnica para extraer gas de esquisto. Ahora, esa técnica, con partidarios y detractores, tiene ya en su haber una sentencia judicial en Estados Unidos. Una familia que vivió próxima a la técnica del fracking ha sido indemnizada como víctima de los daños derivados de su aplicación. Nos hace recordar, en nuestro país, los movimientos telúricos registrados con ocasión de los depósitos submarianos de gas, seísmos que cesaron cuando dejó de manipularse en tales depósitos. Hay otros movimientos ciudadanos contrarios a la búsqueda de petróleo en Baleares y Canarias. Por lo general, los tribunales suelen ser bastante conservadores y pro-ciudadanos ante esta clase de “experimentos”… El candidato Cañete sigue hablando del “enemigo socialista”, como causante de casi todos los males del país. Entre ellos, la congelación de las pensiones. Alguien debiera recordarle que cada gobierno hace sus presupuestos a medida de los datos de que dispone, y que el PP no reduce, pero mantiene la capacidad adquisitiva de las pensiones en un 0,25 por ciento varios años consecutivos, lo que, a la hora de la verdad, significa un evidente retroceso en relación con el coste de la vida. A Cañete le faltan tablas, datos, y viene resultando un tanto safio y poco elaborado cuando habla de méritos propios y deméritos ajenos. ¿Quién no tiene herencia recibida? ¿O conviene recordar el penosísimo atentado de los trenes de Madrid como probable efecto de la intervención de España en la guerra de Irak? Poco a poco, parece que el presidente valenciano Fabra logra su propósito de ir depurando de corruptos las Cortes Valenciana. Ahora es Sonia Castedo, que además es alcaldesa de Alicante, la que deja las filas del PP en la Asamblea valenciana. Todavía le queda su otra plaza, la alcaldía, a la que debiera renunciar también cuanto antes. JOSÉ CAVERO