LA CANDIDATURA VALENCIANA, REPLETA DE IMPLICADOS

CAMPS VUELVE A IMPONERSE A RAJOY
Aunque aun falten tres semanas para el comienzo de la campaña electoral propiamente dicha –es decir, el tiempo en el que, según la ley, se puede pedir el voto a los ciudadanos para una candidatura o candidato concreto-, la campaña ya está aquí, ya ha llegado, y ocupará cada vez más espacios y tiempos en los medios informativos. Primera constatación: Zapatero ha dejado de existir, siquiera de momento, en la campaña. Ya ha dejado de ser, según parece, el gran culpable de todos los males, aunque no es previsible que desaparezca de los mítines que se llevarán a cabo en todo el país. En cambio, ahora mismo, el gran protagonista del “festejo electoral” no es otro que Francisco Camps, president de la Generalitat Valenciana, imputado por corrupción en el caso de los trajes, algo que, sin embargo, no ha sido impedimento para que vuelva a repetir como cabeza de lista autonómico del PP para el País Valencià. Es una gran duda de estas y de anteriores elecciones: ¿Tener causas pendientes con la Justicia es problema para concurrir? Alguna vez, los partidos llegaron al acuerdo de que sí, de que eso invalidaría a los candidatos a unas elecciones, pero siquiera en éstas no parece que sea de ese modo. En las listas elaboradas por el Comité Electoral del PP de la Comunitat Valenciana y remitidas a su órgano homólogo a nivel nacional, aparecen, según nos detallan, cuatro imputados, entre ellos el propio Francisco Camps, y seis implicados en diferentes escándalos de corrupción. La mayor parte de ellos, en la parte alta de las listas. Y sin embargo, el Comité Electoral Nacional, que preside el diputado Miguel Arias Cañete, dio luz verde, tras cinco horas de intensa deliberación, a esas candidaturas enviadas por Valencia, lo que significa que Rajoy también las avala. O, dicho de otra manera, como cuando Camps se autoproclamó candidato a la Comunidad, sin esperar los tiempos que marcaba Rajoy, también ahora impone su propia lista, sin atender a los criterios que le hubiera gustado imponer a Rajoy. De nuevo, Camps pasa factura a Rajoy por su inapreciable ayuda en el Congreso de Valencia… Y de esta manera, el comité electoral, y Rajoy, se decantaron por respetar la decisión original, pese al "riesgo y desgaste" que supone hacer a los ciudadanos una oferta electoral en la que se cuelan una decena de implicados en corrupción. Esa es la cuestión que se ha debatido en el PP, el valenciano y el nacional: ¿pesarán las inculpaciones a la hora de emitir el voto de los ciudadanos? En el PP se tiene la seguridad, avalada por sus encuestas electorales, de que no. Es más, de que sus candidatos inculpados, empezando por Camps, batirán todos los récords de apoyo popular en las urnas. Y ello sería de ese modo pese a que el líder del PP, Mariano Rajoy, ha evitado de todos los modos la polémica de esas listas, sobre todo la de la inclusión del imputado Ricardo Costa como número siete por Alicante. "Costa, ¿quién es Costa?", llegó a decir el jueves a los periodistas cuando le preguntaron sobre el tema. Y aún fue más allá cuando aseguró que las candidaturas que el PP presente no son algo de lo que él, como presidente nacional del partido, se ocupe. La cuestión es: ¿Rajoy no ha querido, no ha sabido o no ha podido, enfrentarse a “las listas de Camps”? Un destacado dirigente que citaba el diario Público se preguntaba: "¿Con qué cara le decía Camps a cualquiera de los imputados o implicados en corrupción que no iban en las listas?" Y se respondía a sí mismo: "El president de la Generalitat no tiene autoridad moral para hacer limpieza en las candidaturas cuando él, la máxima cabeza visible, está a un paso del banquillo. Y ha sido avalado por Rajoy". Con otra característica más: Entre los imputados, además del president, están el mencionado Ricardo Costa, ex secretario general del PP valenciano; pero también aparecen Jorge Bellver, número tres por el Ayuntamiento de Valencia y al que se investiga por prevaricación; y Pedro Ángel Hernández Mateo, alcalde de Torrevieja e imputado por el mismo delito que Bellver. ¿Y qué? Parecen decir a sus electores valencianos los responsables del PP valenciano. “Votaréis lo que os digamos, y punto”… Porque el listado –diez implicados, dice Público, nueve, dice El Mundo, once, asegura la página web de El País- lo integran, además, el vicepresident primero de la Generalitat, Vicente Rambla; el vicesecretario de Organización del partido, David Serra; la tesorera, Yolanda García; y Milagrosa Martínez, presidenta de Les Corts. Todos ellos están relacionados con el caso Gürtel. Y a ellos se suman los nombres de Sonia Castedo y Luis Díaz Alperi, relacionados con el caso Brugal, en el que está imputado José Joaquín Ripoll, presidente de la Diputación de Alicante, quien, por cierto, no opta a un escaño en Les Corts pero sí ha conseguido ir de número dos por el Ayuntamiento de Alicante, lo que le permitiría volver a ponerse al frente de la Diputación. Todo, pese a la férrea oposición que en los últimos meses ha ejercido Sonia Castedo, la número uno por el consistorio de Alicante. En el PP de Valencia se defiende su propia decisión y aseguran que desde la dirección nacional del partido jamás se les dio la consigna de excluir a imputados de las candidaturas. Sólo, recuerdan, se les recomendó mantener en sus puestos a aquellos candidatos que habían funcionado en la legislatura que está a punto de agotarse.
De modo y manera que los casos de corrupción han entrado de lleno en las candidaturas autonómicas, y ahora comprobaremos cómo desde el PP se da la réplica al PSOE: “Vosotros también presuntos implicados”, y comprobados corruptos…” , dirán. Y los ciudadanos, una vez más, comprobaremos el intercambio de acusaciones y esperaremos a ver si la corrupción “paga en las urnas”. O también resulta indiferente, y hasta recibe premio…