NINGUNA PRISA, Y MENOS CON COACCIONES POLICIALES

AUN NO SE RETIRAN LOS ACAMPADOS DEL 15-M
Me lo explica uno de sus participantes en la acampada de la Puerta de Sol de Madrid, que ha pasado buena parte de la tarde y noche en ese “punto kilométrico cero”: Cada vez son más los jubilados y parados, y cada vez es mayor la oposición de los vecinos. Pese a lo cual, no hay deseos de abandonar esa ni otras plazas, entre otras razones, porque su éxito ha sido indudable en repercusiones en todo el mundo. En las últimas horas, en París. De manera que, sin apresuramientos, sin coacciones, la Asamblea del Movimiento 15-M en la Puerta del Sol aprobó en la noche del domingo la propuesta de consenso de mantener el campamento, si bien sus integrantes admiten que deberán llevar a cabo una "reestructuración" que solucione problemas de seguridad, alimentación y convivencia que se han producido durante las últimas dos semanas. De modo que, pese al deseo de muchos vecinos, los acampados del 15-M en Madrid y Barcelona se quedan. Al menos, de momento. La indignación del movimiento no se curó con las elecciones y parece que sobrevivirá también a las acampadas. “No nos vamos. El movimiento continúa. Vamos a reestructurar el campamento porque somos responsables. Los grupos de trabajo seguirán en el espacio público”, expuso una portavoz de la acampada en Madrid, que eligió quedarse indefinidamente. La policía, por su parte, y según se comunicó en la asamblea, garantiza el diálogo con los concentrados hasta el martes.
Las plazas españolas que han albergado durante las últimas semanas el movimiento de los indignados, superando prohibiciones, tormentas y cargas policiales en algunos casos, vivieron un domingo de asambleas para decidir qué hacer: seguir o largarse. Pero no hay duda de que la clave está en Madrid. Es el símbolo del movimiento, el foco de atención de lo que en medio mundo se conoce ya como la “spanish revolution”. Decenas de personas intervinieron en la asamblea multitudinaria, con turnos de palabra de tres minutos. Las peticiones de los comerciantes de la zona, que han mostrado también su indignación y su caída de ventas por la permanencia del campamento, estuvieron en todas las intervenciones.
En la gran asamblea de la Puerta del Sol, con varios miles de personas participantes, los indignados de Madrid insistieron en que la desaparición del campamento no significaba, en ningún caso, la muerte del Movimiento 15-M. Lo mismo se clamaba en Barcelona, tras los violentos incidentes del viernes. En la capital catalana decidieron, antes que en Madrid, que la plaza de Cataluña seguirá tomada, al menos, hasta el martes. En cuanto a la Puerta del Sol lo estará de manera indefinida. De modo que la duda en Madrid no es tanto si quedarse o no, sino cómo quedarse, ya que comienza a haber “problemas de convivencia y con la electricidad” que, según los portavoces, han generado “una situación de inseguridad”. En concreto, la comisión de Infraestructuras pidió que no se mantuviese el campamento “indefinidamente”. La de Información puso un plazo máximo de “no más de una semana” y la de Alimentación pidió directamente ser eliminada porque tienen muchos problemas con gente ajena a la acampada que se lleva la comida y no respeta los turnos. Pero lo que sí tienen claro es que el movimiento continuará vivo, con tiendas de campaña o sin ellas, en grupos de trabajo por barrios y ciudades. Antes de la reunión en la que los indignados decidían si se iban o se quedaban, cientos de ciudadanos pasaron horas al sol para escuchar sus propuestas. Se da la circunstancia de que el sábado se produjeron hasta 121 asambleas en distintas zonas y municipios de la Comunidad de Madrid a las que asistieron más de 20.000 vecinos, según datos que proporcionó la organización. Anoche, antes de la votación, se escucharon las opiniones de unos y otros. Especial importancia tuvo la intervención de los acampados, las decenas, a veces cientos de personas que pernoctan en la plaza pública, y que trasladaron a la asamblea lss problemas de seguridad, con especial atención a los robos y la tenencia de armas blancas; de suministro de alimentos, material de todo tipo y electricidad; de convivencia y por el malestar de vecinos y comerciantes; y hasta de las inclemencias de una primavera de sol aciago y persistentes chaparrones. Según uno de sus portavoces, la existencia del campamento debe estar supeditada a "buscar soluciones y retirar obstáculos", como podría ser reducir el campamento para favorecer la convivencia con vecinos y comerciantes, después de que las autoridades han hecho llegar a los acampados que no está prevista ninguna intervención policial inmediata, como sucedió en la jornada del viernes en Barcelona. De manera que las comisiones se mantendrían en el espacio público y las asambleas se seguirán realizando como hasta ahora. En esta asamblea del domingo también se produjeron reiteradas muestras de apoyo a las protestas de los 'Indignados' en París. Entre las primeras propuestas planteadas se expuso la posibilidad de retirar del campamento, pero dejando una representación para que los ciudadanos puedan seguir trasladando sus propuestas y continuando con la movilización en los barrios. Otros han considerado que hay que marcharse antes de que los echen, porque "a la larga no nos va unir Sol, sino las ganas de luchar". Hay otros grupos, la mayoría, que apoyaban mantener una semana más el campamento, hasta que se definan mejor las iniciativas del movimiento. Otros colectivos proponen una reestructuración porque está habiendo problemas de "seguridad" y de "convivencia". El moderador de la asamblea dijo que el objetivo es "qué se va a hacer con la acampada", aunque aclarando que en cualquier caso "el movimiento continúa", a lo que el público respondió con una gran ovación . La votación se volvió a repetir cerca de la medianoche, ganando nuevamente la postura de no desalojar el campamento. Y de igual manera, en la asamblea de barios, la reunión de la tarde contó con dos intérpretes del lenguaje de sordomudos y la gente permaneció sentada en el suelo, dejando abiertos unos pasillos para permitir pasar a los transeúntes. Una y otra vez, los "indignados" de la Puerta del Sol ha destacado el éxito de las movilizaciones secundadas en los barrios a lo largo del sábado, así como en las asambleas que desde el mediodía se han celebrado hoy para conocer la opinión de los ciudadanos. Según los datos recibidos en la Acampada Sol, más de 25.000 personas se reunieron a lo largo del domingo en distintos barrios de Madrid para hablar sobre la continuidad de la acampada en la Puerta del Sol y del movimiento. En muchos de estos barrios, la decisión ha sido volver a reunirse el próximo sábado para seguir debatiendo y ejerciendo democracia directa y consensuada en las plazas. No hay prisa alguna por disolverse... Y menos aún si se produjeran intervenciones policiales...