martes, 2 de agosto de 2011

ZAPATERO Y EL REY, FELIZ ENCUENTRO EN MALLORCA

UNAS VACACIONES ESTIVALES DIFERENTES
Se suceden los días de las vacaciones de agosto pero no se
tranquilizan los mercados, ni siquiera con la noticia del acuerdo, en
el último momento, entre demócratas y republicanos estadounidenses
para reducir la deuda nacional. Hay acuerdo en el Capitolio, pero la
prima de riesgo y los especuladores se ceban con la deuda española e
italiana, que en las últimas tres semanas "caminan juntas" en su
ascenso hacia el calvario del precio del bono alemán. ¿Quién dijo que
superar los 300 puntos de diferencia significaría, automáticamente, la
necesidad de rescate para la economía española? Pues ya hemos superado
los cuatrocientos, y ya pocas cosas nos sorprenden... Está visto que
la especulación de los mercados no descansa ni siquiera en agosto, ni
cuando todo parecía que iba a producirse una pausa y un alivio.
En la política, tampoco hay pausa ni alivio de ninguna especie.
Zapatero viajó a Palma de Mallorca para una visita que
tradicionalmente se produce cada verano para dar cuenta al Jefe del
Estado de las más recientes novedades, de las que el Rey suele estar
"al cabo de la calle": las conoce siempre el primero y de primera
mano, como sucedió con la fecha electoral decidida por Rodríguez
Zapatero. Pero algunos medios prefieren cen trarse en el hecho de que
Zapatero no hizo mención de las pretensiones del candidato Rebalcaba
de ser "el líder del PSOE", sin la previa celebración del
correspondiente congreso del partido que deberá designar al sucesor de
Zapatefro en la cabecera del partido socialista. Algún analista,
incluso, no pierde la ocasión para analizar las relaciones personales
de Zapatero con el Rey, y sostiene que no han sido "de las mejores".
Debiera recordarse que posiblemente el encontronazo más severo, en
esas altísimas instancias, posiblemente fue el que se produjo entre
don Juan Carlos y Aznar, entre quienes no hubo, precisamente, buena
química. La hubo entre el Rey y Suárez, pero también hubo un tuiempo
de severísimas discrepancias. Hasta el punto de que el jefe del
Gobierno dimitió de su cargo, según explicó, porque hab ía perdido la
confianza del Jefe del Estado. Con Felipe González fue
extraordinariamente fructífera la relación..., como también lo ha sido
con Zapatero, dígase lo que se diga. De otro lado, es muy considerable
y digna de felicitación la mejoría que se ha producido en el andar del
Rey tras su operación de rodilla.
Por lo demás, empiezan a comprobarse "las ausencias" de la clase
política, ya en sus puestos de vacaciones. Quedan en sus despachos los
encargados de las correspondientes campañas electorales de los
candidatos, disponiéndolo todo para el regreso general, en septiembre,
porque esta vez el Parlamsnto deberá dejar resueltas algunas
cuestiones pendientes. De manera que en septiembre habrá una cierta
simultaneidad: actividad política corriente, de una parte, y
precampaña electoral, de otro lado, tratando de garantizar o bien la
victoria electoral o bien una cierta consecución de un número de
parlamentarios que impidan hablar de barrida extinción y derribo...

No hay comentarios: