Rato y otros 32 consejeros de Bankia, al banquillo de la Audiencia
El juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu ha decidido atender la solicitud del partido de Rosa Díez, Unión, Progreso y Democracia, y sentar en el banquillo a Rodrigo Rato y otros 32 exconsejeros de Bankia y de su matriz, Banco Financiero y de Ahorros, por entender que pueden haberse producido en Bankia -su formación como resultado de la fusión de siete cajas de ahorros, su discutida salida a bolsa, sus distintas y contradictorias cuentas en el primer año de gestión del nuevo equipo formado por Rodrigo Rato y su costosa nacionalización, al precio de 23.500 millones de euros- hasta cuatro importantes delitos: falsificación de cuentas, administración desleal, maquinación para alterar el precio de las cosas, y apropiación indebida. En resumen, el juez Andreu admite a tamite el caso “por el perjuicioi causado a la economía nacional”. Como explica ABC, los consejeros de Bankia y su matrriz FBA pudieron distorsionar las cuentas para dar la impresión de que su situación patrimonial era mejor que la realmente existente; los consejeros intentaron mantener a toda costa el precio de cotización y los ratios de solvencia; hay un perjuicio económicamente evaluable para cada accionista, y habría prevalecido el favor político al rendimiento económico. En fin, pudo haberse producido apropiación indebida en relación con las indemnizaciones, prejubilaciones, blindajes, remuneraciones y financiación “autoconcedidas” por el órgano de administración de las cajas.
¿Llegará a algo, es decir, a grandes o leves condenas, a grandes o pequeñas revelaciones, este proceso que ahora se nos anuncia, o como no pocos sospechan, quedará en nada y todo padecerá el tamiz de los intereses políticos, en el que casi todos los partidos se ven sentados en el banquillo de los acusados? Esa es la primera cuestión: La querella la plantea UPyD que resulta ser la única fuerza política ausente del consejo de administración de BFA-Caja Madrid-Bankia, donde se sentaban y percibían buenos sueldos políticos, sobre todo, del PP, pero también del PSOE, de IU, de UGT, de CCOO y hasta de la patronal CEOE...
Lo cierto es que “el caso Bankia” ha llegado a ser un “caso judicial”, un elemento “de escándalo”, y un gravísimo escollo para no pocos inversores en una entidad que se “vendió”· como extraordinariamente rentable y con gran futuro. Precisamente, la designación de Rodrigo Rato como presidente pretendía ser una garantía de solvencia, por razón de su paso por el Gobierno, como “ministro eficaz” en las cuentas del Gabinete de Aznar y en la entrada del euro, e incluso por razón de su paso por la Gerencia del Fondo Monetario Internacional, cargo en el que ya dejó “algo que desear”: No se enteró de la crisis financiera y económica internacional, y abandonó su cargo antes de que espirara su mandato, alegando razones familiares.
Pues bien, “Rato y sus treinta y dos” se sentarán en el banquillo, por la iniciativa de Rosa Díez y su partido, y deberán explicar sus actuaciones, tal y como muchos de los inversores y accionistas del “banco madrileño y del PP”, han reclamado apasionadamente. Se pudo comprobar en la reciente Junta General de Accionistas, que resultó, probablemente, un anticipo de lo que podría suceder cuando dé comienzo la vista del juez Andreu. Tendrá un claro morbo contemplar sentados como acusados a políticos, empresarios, profesores con nombre bien conocidos: Rato, Olivas, Acebes, Arturo Fernández, Francisco Verdú, Romero de Tejada, Jesús Pedroche, Jorge Gómez, Fernández Norniella, José Antonio Moral, José Manuel Serra, Antonio Tirado, Araceli Mora, Juan Llopart, Alberto Ibáñez, Mercedes de la Merced, Rodríguez Ponga, José María de la Riva, Javier López Madrid, Carmen Cavero Mestre...Y así, hasta treinta y tres “presuntos”. Po0r cierto, que se preguntan en El Mundo por qué no aparece en esa lista Virgilio Zapatero, exministro sociaoista y ex rector de la Universidad de Alcalá de Henares, que “era tan consejero de Bankia como los demás encausados”. La fiscalía tiene ahora una tarea que completar la determinación de las responsabilidades de cada cual en los presuntos delitos que parecen haberse acumulado en Bankia. A ello deberán ayudar los testigos también citados por el juez de la Audiencia: Fernández Ordóñez, Julio Segura...Pone de relieve el diario El País que los cuatro delitos que se apuntan pueden suponer penas de hasta 15 años de cárcel. Y señala La Voz de Galicia que el juez decidirá el próximo día 23 si interviene la entidad, “lo que supondría la salida de Goirigolzarri”. Cuenta Expansión que los despachos de abogados se preparan para actuar, y menciona los grandes bufetes de Miguel Bajo, Rodríguez Ramos, Rodríguez Mourullo, Molins y Silva, Oliva-Ayala, Ramón y Cajal Abogados, así como Uría, Garrigues, Baker, o Albiñana. Dice este mismo diario Expansión que Anticorrupción cree que no debe haber intervención y que la lista de imputados podría reducirse. Y se indica en Cinco Días que también deberá examinarse la responsabilidad de Miguel Blesa y otros gestores anteriores a la llegada de Rato. De momento, como señala El Economista, Gobierno y PP quitan huerro y apelan a la presunción de inocencia, y el ministro Margallo, que parece “el ministro de guardia” en el verano, “lamenta enormemente la inculpación de Rato, porque le quiero bien”.
¿Y los demás? Que los parta un rayo y los condene el juez...
El espectáculo está garantizado.
jueves, 5 de julio de 2012
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