El nuevo plan de los 400 euros, severo
recorte a las ayudas a parados de larga duración
Como cuando la reforma laboral, la
ministra Fátima Báñez ha vuelto a tener abundante protagonismo, en las últimas
semanas, por virtud de la norma llamada de los 400 euros, y sobre todo, de su
adecuación o actualización, que, como se suponía, la modifica y, como determinan “los
tiempos”, recorta de manera sustancial.
Como relata este sábado el diario Abc, la ministra de Empleo desgranó este viernes
los nuevos detalles del Plan Prepara que amplía en el tiempo la concesión de un
mínimo de 399 euros para los parados de larga duración. El nuevo plan, tal y
como lo calificó la ministra, que eludió hablar de prórroga, endurece los requisitos para los desempleados que hayan agotado la prestación por
desempleo. En primer lugar, los ciudadanos que lo requieran sólo podrán ser
beneficiarios del plan durante una vez en su vida y
después de haber recibido el subsidio del paro durante un año. Además el
solicitante deberá acreditar haber buscado activamente trabajo o haber
realizado actuaciones para incrementar su empleabilidad durante el mes que
transcurre desde la pérdida de otras prestaciones hasta la solicitud, tal y
como ha informado Empleo. Por otro lado, no todos los parados de larga duración
podrán recibir la ayuda. El «colchón familiar» será determinante a la hora de
conceder la ayuda. El límite estará en que los ingresos totales de los padres
no superen los 481 euros divididos por miembro familiar bajo el mismo techo. De
este modo, todos los jóvenes cuyos ascendientes ganen este dinero multiplicado
a partir de dos (dependiendo del número de familiares) no serán beneficiarios
de la ayuda. Así, un joven que cohabite con su padre y madre y éstos ingresen
entre ambos más de 1.443 euros, se
quedará sin percibir la ayuda. En el caso de que sean dos los hijos, los
ingresos no podrán exceder los 1.924 euros ya que al dividirlos por cabeza,
obtenemos 481 euros por cada una. Si la familia es monoparental y tiene a cargo
a un solo hijo, la renta no podrá sobrepasar los 962
euros para que el vástago, en caso de llevar parado más de
un año y haber agotado la prestación, tenga derecho a percibir los 400 euros. No
obstante, el nuevo Prepara también incluye mejoras en las prestaciones con la
mirada siempre puesta en aquellos que tengan más cargas familiares. La ayuda se
amplía hasta los 450 euros para los parados de larga duración con al menos dos
personas a su cargo (también cuentan los ascendientes).
En la versión de El Mundo se enfatiza que
el Gobierno exigirá que los parados que
cobren la ayuda de 400 euros hayan buscado trabajo
durante un mínimo de 30 días después de dejar de percibir la
prestación o subsidio por desempleo y presenten un certificado de su CCAA o
Ayuntamiento que detalle si tienen concedido otro tipo de asistencia. Así
figura en el Real Decreto-ley que prorroga por tercera
vez el programa de recalificación profesional (conocido como plan Prepara), que se
ha publicado este sábado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y que entrará
en vigor este domingo, con efecto retroactivo desde el 16 de agosto. Para
percibir ese apoyo financiero se exigirá que los parados que ya no
perciban la prestación o el subsidio de desempleo lleven inscritos como
demandantes de empleo al menos 12 de los últimos 18 meses o bien tengan cargas
familiares. Cuando dejen de cobrar la prestación o el subsidio, los parados
tendrán que realizar "durante un período
mínimo de treinta días, acciones de búsqueda activa de empleo,
las cuales se deberán acreditar en el momento" de la solicitud de la ayuda
de 400 euros. Según fuentes del Ministerio de Trabajo, entre esas acciones
puede incluirse, por ejemplo, un trabajo que haya durado
unos días o unas
pocas semanas y, en consecuencia, no genere derecho a prestación. Los solicitantes
de la ayuda de 400 euros también
deberán aportar un certificado emitido por su Comunidad Autónoma o entidad
local, "donde
se haga constar la percepción o no" de todos aquellos subsidios (con su
correspondiente cuantía) que pudieran cobrar el beneficiario y/o su unidad
familiar. De esta manera, el Gobierno busca evitar que se pueda percibir de
forma simultánea la ayuda del plan Prepara y otro tipo de ayudas
autonómicas, que normalmente superan en cuantía a aquella. El
Gobierno también tiene previsto proponer ante la Conferencia Sectorial de
Empleo y Asuntos Laborales que los resultados del seguimiento del plan "sean tenidos en cuenta en la distribución de
fondos destinados a políticas activas a distribuir a las Comunidades Autónomas".
Por otro lado, el Ministerio de Trabajo destacó en que, a partir de ahora, se
podrá cobrar la parte sobrante del Plan Prepara si se consigue un trabajo de escasa duración,
que no otorgue derecho a prestación, y en consecuencia, se tiene que dejar de
cobrar esa ayuda. El Consejo de Ministros aprobó ayer prorrogar por seis meses más la ayuda de 400 euros para los parados
que hayan agotado las prestaciones, una cantidad que se elevará a 450 euros
para aquellos con al menos tres familiares a su cargo, incluida la pareja. Como
ya estaba establecido, el programa sólo se puede cobrar una
vez, por un periodo de seis meses, sin posibilidad de repetir. Para
cobrar la ayuda, será necesario que los ingresos de la unidad familiar no
superen los 481 euros mensuales por cada miembro, si bien hasta el momento no
se tenía en cuenta a los padres del
solicitante de la ayuda como
miembros de la familia (aunque vivieran en la misma casa), sino sólo a su
cónyuge o pareja y a sus hijos menores de 26 años o con discapacidad. Se trata,
según ha explicado la ministra de Empleo, Fátima Báñez, de dar prioridad a
quienes tengan cargas familiares e ingresos limitados (no superiores a 481
euros por persona en cómputo global) frente a quienes cuentan con un "colchón familiar". Según
el decreto original, las ayudas son "compatibles con cualquier otro tipo
de rentas mínimas, salarios sociales o ayudas análogas de asistencia social
concedidas por las administraciones públicas que pudiera percibir la persona
beneficiaria, siempre que el importe de éstas sumado al de la mencionada no
supere el importe del 75% del Salario Mínimo Interprofesional". La
ministra de Empleo, Fátima Báñez, explicó que a partir de ahora sólo podrán
solicitar el Plan Prepara los parados de larga duración. Esto es, las personas
que lleven sin empleo 12 de los últimos 18 meses al menos. Salvo en el caso de
que tengan al menos un hijo a su cargo, en cuyo caso podrán solicitarla
independientemente del tiempo que lleven sin trabajo. Empleo tendrá en cuenta
"la renta del núcleo familiar que convive con el solicitante",
incluyendo, y ésta es la novedad, a los padres. Hasta ahora podían pedir los
400 euros los parados que ya hubieran agotado el resto de prestaciones o
subsidios y que no se hubieran beneficiado del programa Prepara con
anterioridad. Eso sí, tenían que acreditar una renta propia o per cápita
familiar inferior al 75% del salario mínimo interprofesional (481 euros). Es
decir, que el solicitante no podía ganar, a través de otro tipo de ayudas y
subsidios, más de esa cantidad. Para el cálculo de esa renta se tenía en cuenta
su persona, su pareja y sus descendientes. Ahora, en cambio, el Gobierno tendrá
en cuenta también la renta de los ascendientes, lo que dejará fuera a todas
aquellas personas que vivan con sus padres si la renta per cápita familiar
supera esos 481 euros mensuales. Si el solicitante vive solo, únicamente se
tendrá en cuenta su situación económica. Si lo hace con su cónyuge, la de
ambos. El anuncio ha generado cierta confusión, pero los abuelos no se tendrán
en cuenta para el cálculo de la renta familiar per cápita... en el caso de los
nietos. Un ejemplo práctico. Un solicitante que viva en la misma casa con sus
dos padres y dos abuelos tendrá que acreditar una renta per cápita familiar
inferior al 75% del salario mínimo con sus ingresos y los de su padre y madre,
pero no el de los abuelos. Sin embargo, si fuera el padre o la madre de esa
familiar el que solicitara esa ayuda, sí se tendría en cuenta lo que gana tanto
sus propios padres (los 'abuelos') como su hijo.
Recuerdan
El Mundo y El País que desde su puesta en funcionamiento ha costado 1.120
millones de euros por semestre. Se han beneficiado de las ayudas (399 euros
durante seis meses máximo) 500.859 personas, de las cuales 307.029 ya han
dejado de recibir fondos. Menos del 8% de los beneficiarios asistió a cursos de
formación para su recalificación profesional, pese a ser uno de los objetivos
fundamentales del programa. Además, el 70% de los beneficiarios que ya han
terminado el programa "no se ha reinsertado en el mercado laboral".
De éstos, únicamente el 18% logró colocarse más de dos meses en un puesto y
menos de un 1% logró un contrato indefinido. Señala El País que la idea del
Gobierno es mantener los 1.120 millones de euros de presupuesto global. Por más
que se le insistió en la rueda de prensa, la ministra rechazó hacer
estimaciones sobre los parados que verán incrementada en 50 euros la ayuda o
los que quedarán fuera con las nuevas condiciones. Dijo, no obstante, que si es
preciso se pedirá una ampliación del crédito para pagar la prestación. E
insistió en que los resultados del plan son
“decepcionantes”, porque no han servido para que sus beneficiarios vuelvan al
mercado laboral. Omitió el contexto de destrucción general de puestos de trabajo,
dice El País.
El
País también explica que las nuevas condiciones del Plan Prepara son más
restrictivas. El nuevo plan establece condiciones más duras para que los
desempleados puedan percibir esa ayuda, al tiempo que la eleva de 400 a
450 euros para
personas con dos hijos a su cargo y sin que el cónyuge tenga ingresos. Esas
condiciones no se aplican con carácter retroactivo, pero sí impedirán la
incorporación de parados que antes sí podían percibirlo. Básicamente, no podrán
percibir esas ayudas los parados que regresen al domicilio familiar, dice en un
titular. De esa forma, habrá menos beneficiarios para costear el aumento de 50
euros para algunos casos. Esta ayuda solo puede cobrarse durante seis meses. El endurecimiento de las condiciones se establece por tres
vías. La primera al incluir a los padres en el cómputo de los ingresos de la
unidad familiar que, en ningún caso podrán superar los 481 euros por persona,
es decir, el 75% del salario mínimo. Ahora ya existe ese límite, pero la
diferencia es que no se tenían en cuenta los ingresos de los padres. Desde
ahora sí se computarán, de tal forma que al dividirlos entre el número de
miembros de la unidad familiar no deben pasar de 481 euros mensuales. El
Gobierno explicó que esta ayuda es casi de última instancia y ahora se pretende
con nuevas condiciones hacerla “más equitativa y justa”, incluyendo la
referencia a lo que denomina el “colchón familiar”. Es decir, que para un joven
desempleado ya existe la protección familiar si sus padres están activos y
tienen ingresos superiores al límite establecido. El Gobierno habla de “la
falta de vinculación en algunos supuestos de los beneficiarios del programa con
las situaciones de mayor necesidad” para justificar el cambio legal. Para
establecer esta condición, el Gobierno cruzará los datos de dónde están
empadronados los parados. Esta condición ya estaba en el llamado Prodi, el plan
que estuvo en vigor hasta 2011 y que el Gobierno de José Luis
Rodríguez Zapatero sustituyó por el Plan Prepara, eliminando la
referencia a la renta de los padres para contabilizar el límite de ingresos
para percibirlo. La otra vía para endurecer los
requisitos en el nuevo decreto es la de aplicarlo sólo a parados de larga
duración. Hasta ahora lo podían cobrar todos los parados que hayan agotado
todas las prestaciones, sin establecer límites en función del tiempo que se
lleve en el paro. Con el decreto aprobado este viernes, sólo será para parados
de larga duración, es decir, los que lleven 12 meses en el paro, de los últimos
18 meses, y que no tengan cargas familiares. Para esa consideración de carga
familiar basta con que tenga un hijo a su cargo. Por esta vía, se eliminan
también potenciales beneficiarios de la ayuda. La
última condición tiene que ver con la denominada empleabilidad, es decir, la
obligación de acceder a ofertas de empleo o de realizar cursos. El Gobierno
exigirá que los parados que cobren la ayuda 400 euros hayan buscado trabajo
durante un mínimo de 30 días después de dejar de percibir la prestación o
subsidio por desempleo y presenten un certificado de su comunidad o
Ayuntamiento que detalle si tienen concedido otro tipo de asistencia. En este
momento, la norma también habla de cursos de orientación que, como explicó
Báñez, se refieren a charlas sobre cómo hacer currículos o similares, pero no
orientados a encontrar empleo. Ahora, el decreto hablará de cursos de formación
que tendrán que realizar obligatoriamente los parados que reciban la ayuda.
El
líder socialista, Alfredo Pérez
Rubalcaba, reaccionó a través de Twitter al decreto, asegurando que
“seguiremos presionando para
que los 400 euros los reciban todos los que lo necesiten y el programa se
mantenga mientras dure la crisis”. Y en cuanto al tratamiento que las nuevas
normas reciben este sábado en la prensa, son muy variadas: El País dice que
Empleo endurece las condiciones y que la renta de los padres será fundamental.
El Mundo dice que Báñez mantiene los 400 euros aunque no sirvan para lograr un
empleo. Titula ABC “el Gobierno supedita la ayuda de los 400 euros a los
ingresos de los padres. La Vanguardia destaca que los parados con ayuda paterna
no cobrarán los 400 euros y que la prestación, con límite de seis meses, se
percibirá una vez en la vida. También La Razón destaca que el Gobierno
condiciona la ayuda de los 400 euros a la renta de los padres y que los
beneficiarios tendrán que demostrar la búsqueda activa de empleo Y en La
Gaceta: “Las rentas de padres y abuelos condicionarán que los parados cobren la
ayuda de los 400 euros. Y que Báñez dice que es más justo y se gana en equidad…
No
opinarán lo mismo quienes se vean “tachados por el nuevo recorte”…
No hay comentarios:
Publicar un comentario