miércoles, 21 de octubre de 2009

DEBATE PRESUPUESTARIO, CON VICTORIA PARA RAJOY

EL DEBATE MÁS HOSCO.- Como era previsible, el principal partido de la Oposición está convirtiendo el debate a la totalidad de los presupuestos como la gran oportunidad de ataque crítico al Gobierno, y en particular, a su jefe Rodríguez Zapatero. Mariano Rajoy reclamó que sus argumentos se dirigían contra el presidente del gobierno, y llegó a decir que no tenía contra la vicepresidenta económica, encargada de defender los grandes números del Estado. Elena Salgado se vio en la necesidad de denunciar la grosería de Rajoy al evitarla “Una extraordinaria falta de respeto”, se quejó la vicepresidenta... No fueron las únicas críticas las de Rajoy y el PP. También Durán i Lleida, Joan Ridao, Joan Herrera, Rosa Díez..., defensores de sus correspondientes enmiendas a la totalidad, insistieron en sus ataques a los planteamientos económicos del gobierno, que en esta ocasión contienen elevaciones de impuestos que a todos incomodan. Sólo Josu Erkoreka reía desde su asiento, y a lo sumo encajaba alguna de las críticas de algún colega de escaño que no compartía la decisión del PNV de dar su apoyo a las cuentas del gobierno a cambio del blindaje del Concierto económico vasco.

UNA TARDE FELIZ DE RAJOY.- Rajoy tuvo una tarde de enorme expresividad, que contó con el aplauso encendido y eufórico de su bancada, y logró algunas metáforas de gran acierto, como la calificación de “chapuza letal” que aplicó a los presupuestos, o como su aceptación de que es un hombre previsible, una definición que hizo de sí mismo hace ya un par de años, pero que aplicó ahora a la previsibilidad de que sacaría adelante una economía en severa crisis. “Soy previsible porque todo l mundo sabe que yo contendría el gasto público, porque yo no subiría los impuestos...”, replicó un Rajoy enardecido. Y sobre todo, se esforzó por enmendar y negar cualquier consideración que hiciera Salgado, que sostenía que sus cuentas públicas eran las mejores y que preparan al país para la recuperación económica. Por el contrario, el líder del PP pronosticó que empeorarán la crisis y se cebarán con las clases medias.. Los presupuestos, según Rajoy, traerán más impuestos, paro y deuda. En el seno del PP se celebraba anoche la victoria de esta fuerza política en el debate “por incomparecencia del adversario”, después de que Rajoy ninguneara a la ministra Salgado y centrase todas las culpas en Zapatero. Resultó evidente que Rajoy quiso haber debatido con Zapatero, y no con la vicepresidenta. “Pero es lo que toca”, le recordó Salgado, encargada de comprobar el mal estado de las cuentas y las previsiones nada optimistas que aún quedan por superar para salir de la crisis: Más paro y menos crédito.

VICTORIA PARLAMENTARIA.- La victoria parlamentaria, con pocas dudas, se la apuntaron este martes Rajoy y el PP, aunque no conseguirán su propósito final de que los Presupuestos se retiren de su debate. Y además, los presupuestos no acabaron ahí, en la sesión de este martes que posiblemente Elena Salgado recordará como “martes aciago”. Los grandes números del Estado tienen más sesiones de trabajo, y un recuento final que ya es conocido, por virtud de los apoyos que el Gobierno ha conseguido con el PNV y Coalición Canaria. Tras la segunda sesión de debates sobre la totalidad, volverán al Congreso, con toda probabilidad, tras otro vapuleo en el Senado, pero la última palabra la tendrá el gobierno, en las páginas definitivas del Boletín Oficial del Estado. Y habrá quedado viva una consideración última: Rajoy es un vigoroso y hasta crudo tribuno, a quien se aplaudió el diagnóstico sobre una situación incómoda. Pero es cosa distinta que disponga de recetas mágicas. En esta ocasión, volvió a faltarle, como en muchos otros debates sobre el mismo asunto de la crisis, una propuesta concreta, por ejemplo, para recortar el gasto público. No termina de rematar.

EL ESTRENO DE ELENA SALGADO.- El debate presupuestario se inicoó, por tanto, en su sesión plenaria y decisiva, aunque llevamos ya muchas semanas debatiendo esas grandes cifras y prioridades por las que debe regirse la marcha económica en el muy crítico año 2010. El gran debate recayó esta vez en la vicepresidenta Elena Salgado y el primer dirigente de la Oposición, Mariano Rajoy, primer debate para ella, y sexto ya para él en la defensa y ataque a unos presupuestos generales. Salgado subirá al estrado para sustituir a Solbes, pero también para demostrar que se sabe la asignatura y que no le asustan los técnicos o teóricos de los equipos contrarios, de las seis opciones políticas que han presentado enmiendas a la totalidad a esos grandes números. Elena Salgado tiene la ventaja de saber que cuenta con votos suficientes para derrotar esas enmiendas, y en cambio, sabe Rajoy que tendrá un nutrido apoyo de los muchos parlamentarios opuestos a esas grandes cuentas del Estado que suscitan muchas más desconfianzas que otra cosa, en este momento decisivo de salida de la crisis. Al final del debate, los periodistas volveremos a preguntar: ¿quién le ha convencido más de una y otro? Y no faltará quien responda que “Angela Merkel, que prefiere reducir impuestos en vez de subirlos”...

REDUCCIÓN DE IMPUESTOS Y NO ELEVACIÓN.- Porque esa es la opción que todos preferiríamos: reducción de impuestos y no elevación. Pero nuestro déficit público no aguantaría esa broma, ni se cree que la economía reaccionara como entiende que lo hará la alemana: haciendo de tripas corazón y creando riqueza, para así afrontar los mayores gastos a los que se ha comprometido el Estado por causa de la crisis. Pero estamos viendo los distintos procedimientos para afrontar esta nueva situación: Alemania se propone bajar impuestos, y discuten sus dos fuerzas coaligadas, socialcristianos y liberales, sobre la cuantía de esa reducción. Frente a Angela Merkel, que propone quince o veinte mil millones de euros, Westerweller, mucho más radical, llega a plantearse nada menos que 35.000. Pero hay fórmulas alternativas, como el aumento de impuestos español, o como la venta de empresas públicas que propone el líder laborista británico. Todos están de acuerdo en la necesidad de hacer el ajuste imprescindible al que forzarán la Comisión Europea y el redesignado comisario Almunia, de hacer el milagro de que los déficits de los Estados vuelvan, en dos o en tres años, al punto en que estaban antes de que estallara la crisis: en el tres por ciento, o por debajo de este porcentajes, del Producto Interior Bruto correspondiente.

FÓRMULAS DE CADA ESTADO.- Cada Estado se plantea cómo satisfacer esa necesidad: ¿aumentando o reduciendo impuestos, percibiendo otra clase de ingresos para las arcas públicas por la venta de bienes y empresas públicas? Los manuales de economía tampoco proporcionan grandes novedades en esa materia de cómo ingresar más en tiempos de crisis. Salvo el procedimiento de una mayor exigencia en el cumplimiento de los deberes fiscales, y una mayor exigencia para que los agentes tributarios sean más eficaces y logren descubrir más bolsas de fraude...
JOSÉ CAVERO

1 comentario:

Laura L. Ruiz dijo...

Hola,
Me he dado cuenta de que la crónica que cuelga en su web elmundo.es sobre la aprobación de los presupuestos (http://www.elmundo.es/elmundo/2009/10/21/espana/1256114169.html) y que está firmada por el propio site es el mismo que aparece como 'Firma Sindicada' en las crónicas de OTR titulada 'Presupuestos: rechazadas las enmiendas a la totalidad' y está firmada por usted. No se si es un acuerdo estre ustedes, pero cada miércoles ocurre lo mismo con su crónica del Congreso y me sorprende mucho que esto pase así sin más.

Gracias por su atención.

Laura L. Ruiz