viernes, 3 de octubre de 2014

Presiones exteriores El caso de las tarjetas opacas de Caja Madrid parece que está demostrando algunas nuevas formas de reaccionar hasta ahora apenas vistas o comprobadas en casos anteriores. De momento, algunos afectados-beneficiarios por aquel escándalo, tuvieron ya la decencia de devolver una parte, siquiera, del dinero del que hicieron uso indebido –todo. Otros, sencillamente, han dimitido o han sido cesados en sus cargos, y alguno más ha dicho que lo está pensando, pero es probable que lo haga en las próximas horas. Y los restantes, están ya bajo la lupa de aquellos a quienes corresponde ver la honestidad de sus hechos, y consiguientemente, si son adecuados para seguirán cargos de responsabilidad. Algunos no pueden entrar en ninguna de esas categorías, por la sencilla razón de que fallecieron con anterioridad, como es el caso de la exconcejal del PP madrileño Mercedes de la Merced, fallecida no hace mucho tiempo. Per9o, a título póstumo, la revelación de su nombre en esa lista infamante ha tenido que molestar vivamente a la familia. La realidad es así de cruel, tantas veces… ¿Por qué esta vez la reacción es más rápida y más severa? Tenemos algunos elementos que son favorables a esta nueva situación más exigente: De un lado, la aparición de Podemos, que ya de por sí tiene un efecto de exigencia y de moralidad. En segundo lugar, el nuevo secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, que llega asimismo, a su responsabilidad con la necesidad de resultar mucho más exigente con “los suyos”. Y en fin, la necesidad de empezar a prestar atención al clima electoral que, poco a poco, se va elaborando, de cara al 2015. Hay en el ambiente esa necesidad de resultar más coherentes, más honestos, menos laxos, menos condescendientes con todo lo que suponga mal gasto de dineros públicos. Ez evidente que en la gestión de Caja Madrid se cometieron toda suerte de desmanes y abusos. La compra de un banco en Miami posiblemente fue el no va más en esa clase de actuaciones irregulares: Se hizo sin que la decisión la conociera o aprobara la comunidad de Madrid, propietario último de la famosa Caja que tabntos millones nos está costando recuperar… Por cierto, que Esperanza Aguirre parece salvarse, una y otra vez, de los grandes desmanes y desfalcos que han afectado a las cuentas de la Comunidad de Madrid,. Parece que no hubiera estado en el derroche de la Ciudad de la Justicia, ni en el Caso Gurtel, ni en el robo sistemático, cometido por sus máximos ejecutivos, Blesa y Rato, de Caja Madrid. Pues de todo eso tendría que hablar, largo y tendido, doña Esperanza, que estuvo allí, que decidió qué alto cargo con venía al momento procesal, y que debió ser más diligente en los controles, que ahora parece ocultarse en episodios pueriles y estúpidos como el de la multa de tráfico que se negaba a asumir haciendo valer el tradicional “usted no sabe con quién está hablando, señor agente”… Recuérdese el empeño que tuvo Aguirre, en los penúltimos tiempos de Caja Madrid –antes de que llegara Goirigolzarri-, para situar en la presidencia a su muy amigo Ignacio González, que ahora proclama que Esperanza en la mejor candidata para ser alcaldesa de Madrid… Doña Esperanza está descalificada hasta para aparecer en los telediarios y proclamar su profunda y completa felicidad con la marcha de las cosas… Otro tanto cabe decir de Pujol y Mas, que también debieran ser apartados de la consideración de ciudadanos “de bien”. A Pujol ya le ha llegado su sanmartín, y a Mas empezará a llegarle más pronto que tarde. No se puede frivolizar ni enviar a la calle a miles, y hasta millones de ciudadanos, insuflando ideas como la de que “España nos soba”, que son falsedades pero a primera vista rentables y eficaces. Los dos mandatarios, Pujol y Mas, cooperaron ampliamente en la extensión de esa clase de eslóganes, con el resultados que ahora vemos en muchas calles de Cataluña.- Y una palabrita para doña Cospedal, que ahora pretende quE nos convenzamos de que el PP gobernante ha venido para salvarnos de la quiebra del sistema sanitario y del sistema educativo. ¿No era todo o contrario,. Doña Dolores, y los recortes peperos han puesto muchas más dificultades en estos dos sectores claves del Estado de Bienestar heredado? JOSÉ CAVERO

No hay comentarios: