viernes, 26 de marzo de 2010

EL REY, A FAVOR DE LOS TOROS. OPINIONES FAVORABLES Y CONTRARIAS. EL PP, COMO NE EL CASO NASEIRO, PRETENDE ANULAR LOS CASOS JUDICIALES GURTEL Y MATAS.

EL REY, A FAVOR DE LOS TOROS.- Cualquier espectador puede tener aún en su retina la fotografía de la madre del Rey don Juan Carlos asistiendo a las corridas de toros. Era la afición más conocida de doña María de las Mecedes, y es seguro que la compartió siquiera en los últimos años con don Juan Carlos. Por qué no. Ahora, don Juan Carlos ha acudido a Sevilla y a la Plaza de la Maestranza, donde entregó los Premios Taurinos y Periodísticos de la Real Maestranza, ha hecho un canto de exaltación a la fiesta taurina, y preguntado si la Corona apoya el toreo, el monarca respondió “sí, por supuesto”. En esa intervención, el Rey se refirió a los toros como “un mundo cultural y artístico fecundo”. Y destacó el papel del ganadero, que preserva la raza pura del toro de lidia, y ensalzó la apuesta ejemplar de la Maestranza a favor del “trabajo, de la excelencia y de las grandes tradiciones de esta tierra” Y entregó premios taurinos a Manzanares, Morante y al periodista Carlos Herrera. Para que la tradición taurina no decaiga en la familia, don Juan Carlos anunció que la Infanta doña Elena asistirá a algunas corridas de toros e la Feria de Abril de Sevilla.

OPINIONES DIVERSAS.- ¿Hizo bien el rey, en las actuales circunstancias, en participar en ese acto y “mojarse” de esa manera en la controversia sobre “toros sí, toros no”, que se viene produciendo, sobre todo, en el Parlament de Cataluña? Pues, es seguro que con su actuación en la Maestranza, don Juan Carlos “ha dividido a la afición”, como cuando doña Sofía expuso a Pilar urbano, en la biografía que elaboraron juntas, algunas opiniones sobre “moral y costumbres”. Claro que los Reyes tienen sus opiniones sobre lo divino y sobre lo humano. Y que es seguro que las harán públicas cuando les venga en gana. ¿También de modo “oficial” y “solemne”? Eso es lo más dudoso. Y posiblemente se pueda hablar de un acto “políticamente incorrecto” precisamente porque es motivo de división de opiniones, e incluso motivo de debata en un parlamento regional. Es evidente que don Juan Carlos ha querido participar en esa división de opiniones, haciendo pública su opinión sobre el particular, que muchos podríamos adivinar sin necesidad alguna de que la hiciera pública.

CUESTION OPINABLE.- La lectura de las crónicas periodísticas sobre el acontecimiento no colabora, a mi modo de ver, en la neutralidad que, opino, debiera mantener el Rey en cuestiones incluso perfectamente opinables, como su equipo de fútbol favorito. Termina su crónica el diario ABC: “Lo que me parece más importante y quiero subrayar: El Rey de España, en los toros, con su pueblo. Como debe ser...” Otro cronista ha elogiado esa presencia del rey “en el sitio exacto, en el momento oportuno”. Y recuerda precisamente el taurófilo que “la pretendida ley abolicionista antitaurina cuenta las horas para su votación a la espera de enmiendas que prosperen y de enmiendas que se rechacen en el parlament de Cataluña”... Leo en otro periódico: “El rey rompe su imparcialidad para apoyar las corridas de toros”; Don Juan Carlos se declara protaurino en medio del debate político sobre la Feria”. Y señala este diario, Público, que la víspera del suceso de Sevilla, se convocó una marcha antitaurina, para el próximo domingo, en Madrid.

LEÑA AL FUEGO.- Se cuenta en otro medio informativo impreso que “los abolicionistas lamentan el gesto real, y los defensores de la fiesta lo celebran”. Y en esa descripción se resume el “estado de la cuestión”: debaten y se pelean, dialécticamente, partidarios y contrarios de las corridas de toros. Los unos, partidarios de esta costumbre que califican de “demostración cultural”, y los otros, contrarios a esta “bárbara costumbre” de “torturar reses bravas” en una liturgia lamentable y digna de revisión... ¿El Rey debe inclinarse por una de las partes? Uno entiende que mejor hubiera sido su abstención, para no añadir más leña al fuego, y mucho menos, para arrojarse él mismo a la fogata.

LA ESTRATEGIA DE ANULAR LAS ESCUCHAS.- Que el tribunal haya decidido anular las escuchas de conversaciones mantenidas entre defensores e implicados en el Caso Gurtel no es algo casual, que sucede de improviso, y porque sí. Tampoco es nada casual que el defensor de Jaume Matas haya intentado idéntica estrategia en Palma, una vez comprobado el éxito de los estrategas madrileños. No falta quien haya echado mano de una memoria potente y haya recuperado el Caso Naseiro, de financiación ilegal del PP, que en su día se quedó archivado sin llegar a consecuencias penales porque las grabaciones a los imputados fueron “manipuladas” en su versión judicial. No es nuevo que las escuchas entre “presuntos” y sus defensores hayan cooperado decisivamente en la anulación del juicio, del caso, o de una buena parte de uno y de otro. El propio Fiscal general Conde Pumpido ha tenido que decir que aunque se anularan esas escuchas del Caso Gurtel, quedaría mucho caso al que “meter mano” judicialmente, y que esas escuchas no liquidan el proceso en su totalidad, ni mucho menos. De parecida manera, Esperanza Aguirre pareció enfadada con esa posibilidad de anulación, y reclama que la investigación llegue hasta el final, y no se cierre en falso.

DEBATE DE LOS EXPERTOS.- En las últimas horas, han sido varios los expertos que han opinado sobre el particular, y que aún discuten sobre la conveniencia de proceder a esas anulaciones de testimonios captados entre defensores y defendidos. Me remito a la opinión del profesor Marc Carrillo, catedrático de derecho constitucional, que advierte que el abogado no está exento de una intervención judicial de sus comunicaciones si hay indicios delictivos, si bien entiende que las intervenciones deben tener un fin constitucionalmente legítimo. Esa parece ser la cuestión: que los defendidos no se valgan de sus defensores para una protección de fuentes que pudieran ser empleadas en la vista del caso. O dicho de otro modo, que el defensor llegue a ser partícipe de las actuaciones ilegales del defendido. En esos casos, como recuerda Marc Carrillo, el abogado transgresor de la ley no puede quedar indemne si sobre él recaen indicios de acción antijurídica. Y parece que la línea divisoria es muy fina y difícil de delimitar. Es conocido el caso de connivencia de etarras y sus defensores. Pero, ¿no sucede algo parecido entre delincuentes ”de cuello alto” y sus abogados “de postín”?

RECUERDO DEL CASO NASEIRO.- La coincidencia de los dos casos que están situando al PP en situación incómoda -Gurtel y Matas-, han forzado a recordar el caso Naseiro y a preguntarse si no estamos en cada uno d e los casos ante la habilidad de un exministrod e Justicia y un exfiscal que apuran hasta el límite las posibilidades que le brinda el garantismo procesal, judicial y constitucional. Hay, qué duda cabe, enorme expectación sobre lo que suceda en Gurtel -donde discrepan los expertos- o lo que pueda suceder en la vista contra Matas, donde el ex presidente balear y su defensor se aferran ahora a la decisión adoptada por la Sala Penal del Tribunal Superior de Justicia de Madrid de anular parte del sumario de la trama Gurtel, en concreto, el grueso de las conversaciones grabadas en la cárcel entre los tres cabecillas de la trama y sus abogados. Como en Gurtel, el letrado de matas, Rafael Perera, reclama que “todas esas conversaciones deben ser expulsadas de la causa, están invalidadas",. Se refiere a las cintas en que hay tres meses de grabaciones a cuatro imputados en la causa. En ellas figura el intento de Matas de lograr que el fiscal superior de Baleares, Tomeu Barceló, actuara en su interrogatorio judicial e impusiera su jerarquía directa ante los fiscales anticorrupción Juan Carrau y Pedro Horrach, que le investigan desde hace más de un año.

EL ABOGADO PERERA SE APUNTA.- Como en Gurtel ha gestionado el ex fiscal Peláez, defensor de Correa y compañeros, también Rafael Perera, que actúa conjuntamente con el penalista de Madrid Manuel Ollé en la defensa de Matas y de sus familiares imputados, ha anunciado un futuro recurso para lograr la nulidad parcial de las intervenciones telefónicas, que cogieron por sorpresa a los imputados y a sus defensores. Dijo Perera que había comprobado que hay llamadas telefónicas hechas desde mi despacho, a mi despacho, desde mi móvil y a mi móvil durante todo este tiempo, que considera que vulneran su derecho de defensa y las comunicaciones con su cliente, que deben ser, dijo, "en absoluta libertad, discreción e intimidad".
Estos días, unos cuantos abogados celebran el éxito de haber sido escuchados en sus conversaciones con los probables delincuentes...

ALGUNAS CITAS SOBRE EL PARTICULAR:
Onega: La anulación de las escuchas se consigue siempre en el entorno del PP. ¿Es especialidad de la casa? -La Vanguardia
Marc Carrillo: El abogado no está exento de una intervención judicial de sus comunicaciones si hay indicios delictivos -El País
Carlos Elordi: El garantismo procesal puede permitir que unos delincuentes esquiven la ley -El Periódico de Cataluña

No hay comentarios: