EL ACUERDO DE `PENSIONES PUEDE SER INMINENTE. RUBALCABA, EL MEJOR COLOCADO PARA LA SUCESIÓN DE ZP

EL ACUERDO DE PENSIONES, MUY CERCA.- El Pleno del Congreso de los Diputados aprobó la noche del martes las recomendaciones de la Comisión del Pacto de Toledo sobre la reforma de las pensiones por amplIa mayoría, lo que para el ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, supone que la Cámara Baja avala las propuestas que ha planteado el Gobierno a los agentes sociales. El Pleno aprobó las veintiuna recomendaciones por 334 votos a favor, 10 en contra y dos abstenciones. A las recomendaciones se incorporó un voto particular de CiU, pactado con el PSOE, en el que se afirma que cualquier modificación de la edad legal de jubilación debe ser "progresiva" y no "homogénea y forzosa". Además, se incorporó a las recomendaciones del Pacto de Toledo otro voto particular conjunto del PSOE, PP, CiU, PNV, ERC-IU-ICV y Grupo Mixto, en el que se defiende el mantenimiento y mejora del sistema público de pensiones basado en el reparto y la solidaridad. De modo que, según entiende Gómez, el Congreso ha respaldado la propuesta del Gobierno sobre pensiones en un contexto de "gradualidad" y "flexibilidad". La reforma será flexible para los cotizantes con carreras de cotización largas o para aquellos trabajadores con trabajos penosos. Y se hará de forma gradual, para que no aborde los cambios de un día para otro, añadió.
Sobre las reuniones con los agentes sociales, el ministro anunció que en los próximos días las negociaciones se desarrollarán de forma "especialmente intensa" y que podrían alargarse más allá del viernes, cuando el Gobierno tiene previsto, en cualquier caso, aprobar su propuesta.. Según explicó Gómez, el plazo del viernes se podría superar debido a que el pacto no sólo gira sobre pensiones, sino sobre las políticas activas de empleo, el desarrollo de la reforma laboral, la reforma de los convenios colectivos y las políticas energética e industrial. Según el ministro, el acuerdo alcanzado en el Congreso afectará "positivamente" a las negociaciones con los agentes sociales, porque el nivel de consenso es ya alto en los principales ejes de la reforma. El Gobierno, la patronal y los sindicatos se volvieron a reunir el martes con la intención de apurar al máximo las negociaciones. El coordinador del PSOE en la negociación de pensiones, Jesús Caldera, admitió que todavía ve difícil el consenso por el alargamiento de la edad de jubilación a los 67 años, pero, precisó, que todavía hay tiempo para el acuerdo con los sindicatos y que no van a "tirar la toalla". A su vez, el portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, se mostró "optimista" y dijo que Gobierno y sindicatos están a punto de lograr el acuerdo. Según Durán, el principal acuerdo que queda por limar son los años necesarios de cotización para jubilarse a los 65 años con el 100 por cien de la pensión,. El Gobierno propone como mínimo 39 años y los sindicatos quieren rebajar esa cifra. Para el vicepresidente primero de la CEOE, Arturo Fernández, los 39 años de cotización es la cifra clave de la negociación y la que respalda la patronal.
Por otra parte, el PSOE, PP, ERC e IU se han mostrado en el Congreso a favor de revisar las pensiones de los parlamentarios para ver si hay algún caso de privilegio, pero han defendido que se haga desde la seriedad y el rigor, evitando la demagogia.
Se ha sabido este miércoles que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero acudió el lunes a la reunión que mantuvieron gobierno y sindicato sobre la reforma de las pensiones, que comenzó a las 21.00 y acabó pasadas las dos de la madrugada. En ella, según revela El País, el presidente trató de convencer a los secretarios generales de UGT, Cándido Méndez, y de CC OO, Ignacio Fernández Toxo, de que acepten la reforma que el Gobierno ha puesto sobre la mesa para retrasar la edad legal de jubilación hasta los 67 años. Las negociaciones entre Ejecutivo, sindicatos y patronal se encuentran en su "momento más delicado y clave", en opinión del presidente del Gobierno, según fuentes presentes en la cita. Los sindicatos necesitan el acuerdo para evitar una huelga general con un resultado incierto, como la del 29 de septiembre. El Gobierno no quiere otro conflicto social a cuatro meses de las elecciones municipales y autonómicas del 22 de mayo, pero tampoco quiere dar una imagen de debilidad ante los mercados internacionales y ante Bruselas, cuando las autoridades españolas más se sienten observadas por la situación de la deuda. De ahí que ambas partes hayan agotado varias veces los plazos que se habían dado. Pero ya no hay más tiempo. El Gobierno presentará el anteproyecto de reforma el próximo viernes. Si no hay acuerdo, lo aprobará por decreto. Según el mencionado diario, la entrada en escena de Zapatero en las negociaciones no ha supuesto un cambio radical en las posiciones que el ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, ha mantenido hasta ahora. El presidente defendió que para poder jubilarse a los 65 años sean necesarias carreras largas de cotización, en torno a los 40 años, con un leve cambio entre la posición oficial, de 41 años, y la oficiosa, de 39. De nuevo, topó con el rechazo sindical: UGT y CC OO empezaron exigiendo que el requisito se quedara en los 35 años de cotización actuales y pensaban ceder hasta 38. Pero nadie se levantó de la mesa. Las negociaciones continuarán hasta agotar todos los plazos. Esa flexibilidad y alguna otra, como la contemplar excepciones para ciertas profesiones más penosas, no son suficientes para UGT y CCOO. "El Gobierno no se está mostrando flexible, somos nosotros los más flexibles en esta negociación", decía el martes un dirigente sindical. Con la reforma de pensiones el Gobierno quiere evitar que, en 2050, el gasto público en pensiones suponga el 15% del PIB y quede en torno al 12%. Aquí precisamente está una de las principales críticas que hacen los sindicatos a la reforma y a la posición del Gobierno en las negociaciones. "Solo se plantean medidas de ahorro y no de ingresos", repiten los negociadores de UGT y CC OO, que ofertan alternativas como aumentar los incentivos para alargar voluntariamente la vida laboral o aumentar las bases máximas de cotización.
Tal vez en las horas próximas haya ”humo blanco” y celebración con cava...

RUBALCABA, EL MEJOR COLOCADO.- El vicesecretario general del PSOE, José Blanco, ha dicho este martes, según relataba la página web de Público, que si el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, diera "un paso atrás" y no fuese candidato en 2012, el vicepresidente primero, Alfredo Pérez Rubalcaba, "es una opción", pero no ha precisado si sería su candidato favorito. "Es una opción, algunos dicen que la mejor. Mi opinión la daré cuando el presidente del Gobierno anuncie, si es que lo anuncia en contra del deseo de los socialistas que da un paso atrás", ha dicho en un desayuno de Fórum Nueva Economía. Blanco ha dejado claro su "compromiso" y su "lealtad total" a Zapatero y ha asegurado que en el PSOE hay un "deseo de continuidad" del presidente del Gobierno que es "mayoritariamente compartido". Zapatero, ha asegurado, tiene el "apoyo unánime" de su partido para repetir si lo desea, pero está respetando "sus tiempos y su decisión", tal como él mismo ha pedido. El número dos del PSOE no ha valorado, en cambio, la posibilidad de que el PSOE celebrase un Congreso extraordinario después de las elecciones municipales y autonómicas del 22 de mayo si los resultados, como auguran las encuestas, son desastrosos para los socialistas porque, a su juicio, las encuestas no se van a cumplir. "Estoy muy satisfecho de que todas las encuestas hagan esos pronósticos, porque los resultados no se van corresponder con las encuestas, por tanto habrá un antes y un después el 22 de mayo", ha asegurado. También de cara a las elecciones generales de 2012, se ha mostrado convencido de que los progresistas volverán a ser mayoría, igual que lo fueron en 2004 y 2008, porque en España hay una "mayoría progresista" que queda patente "cuando acude a las urnas". Blanco también ha defendido la reforma del sector financiero y la decisión de intervenir las cajas de ahorro del Ejecutivo por ser la más "perentoria" de las que lleva a cabo el Gobierno. Según Blanco, se hará con "transparencia y con máxima salvaguarda de los recursos públicos". "Soy consciente de las inquietudes que existen sobre los riesgos asumidos por nuestro sector financiero en el sector inmobiliario", apuntó. "Y la transparencia es un ejercicio esencial. Y lo es por un por el principio básico de que es preferible poner luz en los problemas particulares que soportar la sombra que estos problemas aislados genera sobre todo el sector financiero", aseguró. En este sentido, el titular de Fomento consideró que las entidades financieras que tengan problemas deberán preguntarse el motivo, "resolverlo y no culpar al mensajero de ese problema". "Lo que hacemos en materia de cajas es erradicar cualquier sobra de duda sobre el sector financiero para que sea motor del crédito y de la recuperación económica", explicó Blanco. "Las entidades financieras bien musculadas y bien gestionadas no tendrán problemas. Si los tienen deben preguntarse el porqué y resolverlo y no culpar al mensajero del problema", indicó Blanco en relación a las reticencias mostradas por algunas entidades a los nuevos planes de reforma. "Nadie debe quedar excluido del momento de exigencia" en el que considera actualmente se encuentra la economía, "si que quiere un país sólido y solvente, y ganar la batalla a la crisis", añadió. "Alfredo es una opción, algunos dicen que la mejor, mi opinión la daré en el momento en que el presidente del Gobierno anuncie, si es que lo anuncia, en contra del deseo de los socialistas, que da un paso atrás", ha dicho en un desayuno organizado por Nueva Economía Fórum.

LA BATALLA DE LAS CAJAS.- En La Vanguardia, un buen conocedor del mundo de las Cajas de ahorros, Manel Pérez, se ha referido a la que llama “batalla de poder entre cajas, bancos, el Banco de España y el Gobierno”, de la que dice que “ha parido un pacto que permite a todos los implicados sentirse por igual vencedores y vencidos, según convenga”. Según explica Manel, Salgado, que por primera vez desde que ocupa la cartera de Economía ha aparecido con un perfil definido y con una línea de acción reconocible, ha jugado la carta del acuerdo, sin plegarse totalmente a las exigencias del gobernador del Banco de España, Fernández Ordóñez, pero aceptando su premisa de partida de que había que modificar la ley y elevar las exigencias de solvencia a las cajas de ahorros. Estas siguen en el punto de mira, consideradas el problema pendiente de la reforma financiera en España. Por eso las nuevas normas sobre solvencia anunciadas el lunes, que discriminan negativamente a las cajas frente a sus competidores bancarios, no dejarán viva ni una sola de las cajas tradicionales, es decir de las que operan directamente como si fueran un banco. Acabarán bancarizadas, - y las más débiles nacionalizadas o desdibujadas como fundaciones-, y esto sin duda satisface a los bancos. Pero no todas las cajas desaparecerán. Ordóñez, el impulsor de los cambios, que había convencido a Zapatero de poner en marcha una nueva ronda para reconvertir el sector, no ha conseguido que se obligue a todas las cajas a convertirse en fundaciones y pierdan su condición de entidades de crédito. Esto último comportaba su liquidación y con ella la de los sectores representados en su existencia, desde los trabajadores a los impositores, pasando por amplios sectores de la sociedad civil. Salgado, pues, aprieta sin ahogar. Aquí estriba la victoria, en este frente, de las cajas, de la CECA y también o especialmente de La Caixa de Isidre Fainé, que el jueves podrá poner en marcha su proceso pionero de cambio, para seguir siendo una entidad de ahorro y operar a través de un banco y de una gran corporación de inversiones empresariales, sin la sensación de nocturnidad y premura que sobre su consejo proyectaba la presión del gobernador. Triunfo en una batalla de altísimo voltaje, que no descarta nuevas descargas si las condiciones financieras empeoran. Termina diciendo Manel Pérez que “no todo son disputas en este asunto. Parece existir un cierto consenso en el diagnóstico de la situación. Salgado comparte la idea del Banco de España y de la CECA de que las cifras necesarias para la segunda ronda del FROB no serán tan astronómicas como auguran bancos y sociedades de inversión: máximo de 20.000 millones, un volumen que no alcanza al 20% de los actuales recursos propios de todo el sistema financiero español. También en cuanto a calendario, pues deja para el otoño la resolución del proceso. Un plazo que en estos días de placidez en los mercados se antoja asumible, pero que si vuelven a producirse turbulencias parecerá una eternidad. Salgado justificó su anuncio, que por cierto adelantó sobre lo previsto inicialmente, con el argumento de aportar seguridad y tranquilidad a los mercados. “,terminaba relatando Manel.

LA REAPARICIÓN DEL CASO FAISAN.- El magistrado Pablo Ruz, que investiga el chivatazo a ETA, decidió el lunes que no sólo no archiva la causa, como le pide el fiscal, sino que ha solicitado una batería de diligencias que van a relanzar una investigación que se prolonga ya por espacio de casi cinco años. Una de las pruebas requiere a Enrique Pamies, jefe superior de Policía del País Vasco, y al inspector José María Ballesteros, dos de los imputados (el tercero es el ex director general de la Policía, Víctor García Hidalgo), a que en el plazo de diez días identifiquen al confidente de ETA apodado “el Romano”, a quien utilizan como coartada para justificar el tráfico de llamadas entre ambos la mañana de la filtración. Según cuenta Carlos Fonseca, un notable experto en lucha contra ETA, en El Confidencial, los policías que investigaron el chivatazo sostienen en sus informes que fue José María Ballesteros la persona que, la mañana del 4 de mayo de 2006, entró en el bar Faisán y entregó a su propietario, Joseba Elosua, un móvil a través del cual Enrique Pamies le alertó de la operación en marcha contra la red de extorsión de ETA que operaba a través del citado establecimiento. Una conclusión a la que llegaron tras cribar las llamadas registradas entre las 11,10 y las 11,40 de esa mañana, la franja horaria en la que se produjo la filtración. Ambos policías declararon que el cruce de llamadas que mantuvieron ese día se debía a que Pamies iba a mantener una cita en el sur de Francia con un confidente de ETA y Ballesteros debía cubrirle. El juez les pide ahora que le comuniquen de forma reservada la identidad, datos de filiación y localización, y cualquier otro que conozcan sobre dicha persona para que preste declaración como testigo protegido y poder confirmar así su coartada. “La invocación sobre la existencia de tal confidente exige, como diligencia indispensable para sostener la versión de los hechos ofrecida por los imputados y, en consecuencia, para llegar al total esclarecimiento de los mismos, la identificación de tal testigo y la practica de su declaración a presencia judicial –escribe el juez Ruz-, lo que no debe ser incompatible con la necesidad de mantener reservada a las partes y terceros ajenos al proceso la identidad real de tal confidente (…) para el caso de existir realmente el mismo”. La existencia de “el Romano”, apodo con el que era conocido el confidente, la desveló Enrique Pamies en su declaración ante el juez Garzón, que instruyó la causa hasta la llegada de Pablo Ruz. Según el mismo cronista, el magistrado ha citado también a declarar el próximo 8 de febrero a dos responsables de los servicios de Información destinados en San Sebastián, y quiere que en el plazo máximo de 15 días los investigadores del caso le amplíen algunos de sus informes y le especifiquen el lugar donde estaban colocadas las cámaras para grabar los movimientos en el Faisán; y a la Guardia Civil un informe pericial sobre los cortes e interrupciones en algunas grabaciones. Pablo Ruz deja también constancia de que la comisión rogatoria solicitada a la juez Levert, que dirigía la operación desde Francia y que ha tardado casi un año en responder, no aporta datos de relevancia que no obren ya en la causa, salvo los nueve folios cuyo contenido ha declarado secretos durante un mes.

LA ABDICACIÓN DEL REY NO ES INMINENTE.- Los Príncipes tendrán que esperar, les guste o no”. Así de contundente ha zanjado el periodista Jaime Peñafiel la polémica sobre la posible abdicación de Don Juan Carlos y la consiguiente llegada al trono de Felipe de Borbón y su esposa, algo que, según ha señalado a Vanitatis, El Confidencial, ciertos sectores perciben como inminente. De un tiempo a esta parte hay una camarilla, en torno a los Príncipes, interesada en que el Rey abdique. Continuamente esos grupos afirman que ya están preparados para reinar. Es un rumor interesado por parte de un grupo que reaviva sin cesar la llamada operación hijo. En mi opinión, es una falta de respeto y de consideración. Y eso que yo no soy monárquico”, confiesa Peñafiel, quien recoge éstas y otras polémicas en un nuevo libro, El Rey no abdica, que sale hoy al mercado. El periodista experto en Casas Reales afirma, con absoluta certeza y rotundidad, que conoce la existencia de esta conspiración. Es más, pone un ejemplo para demostrarlo: La entrevista que sacó la revista Vanity fair sobre los Príncipes de Asturias –que señalaba a Doña Letizia como el flotador de la monarquía y recogía que el heredero estaba preparado para ser Felipe VI-. Según Peñafiel, se prohibió a sus autores presentarla como entrevista. Estos tuvieron la honestidad de decir que se realizó a partir de unas conversaciones con los Príncipes y su círculo. Ahí se desvelaba que el entorno tuvo mucho que ver. Lo tuvieron que disfrazar de reportaje”. Nada más lejos de la realidad. Jaime Peñafiel insiste en que Don Juan Carlos se encuentra “perfectamente” y argumenta su convicción de que el Rey morirá con las botas puestas, entre otras cosas, en una tradición de las monarquías europeas –“en 100 años han abdicado únicamente dos reyes”. También se basa en las palabras de Doña Sofía -que recoge Pilar Urbano en su libro La Reina, muy de cerca-, quien aseguró que Don Juan Carlos reinará hasta su fallecimiento, pues a un rey sólo debe jubilarle la muerte; y en el consejo que el monarca recibió de la Reina Isabel II de Inglaterra de que “no abdicara nunca”. Peñafiel es de los que no creen que doña Letizia esté embarazada. “Si es así, sería una frivolidad estando la Constitución como está. Sería discriminar por segunda vez –la primera tuvo lugar con la designación de Felipe de Borbón como heredero al trono en detrimento de la Infanta Elena-, y no creo que sean tan irresponsables”. El periodista lamenta el confinamiento de la primogénita del Rey en favor de su hermano, ya que, en su opinión, “está demostrando que es la más borbona de toda la familia. Tiene un sentido de la realeza muy borbónico, tiene mucho carácter pero también simpatía. Y sabe cómo y dónde tiene que estar, como su madre. No quiere ser más de lo que es”. Esto, unido al hecho de que le correspondían los derechos, lleva a Peñafiel a plantearse que la hija mayor del Rey podría haber sido mejor heredera que Don Felipe, quien, para el periodista, tiene una formación media, ni es el que está más preparado, ni el que menos”. Añade, asimismo, que el Príncipe de Asturias “se ha olvidado de que tenía derecho a casarse con quien quisiera, pero también con quien debiera, y no lo ha hecho”. También tiene palabras para Doña Letizia, de quien dice que “actúa como la titular sin serlo, e intenta ser más lista que nadie, más inteligente que nadie y más elegante que nadie. Y todo eso sobra”. Con la expresión ¡Larga vida al rey! siempre en su boca, Jaime Peñafiel hace un repaso en su libro por lo que él denomina “la mala salud de hierro del Rey”, que hasta ahora se había tratado con opacidad desde la Casa Real. “Ahora hay transparencia informativa con las operaciones de Don Juan Carlos, pero nadie se lo cree porque nunca la ha habido”. Así, rememora sorprendido la soledad con la que el Rey entró y salió del quirófano el pasado año. “Hay quien dice que ningún miembro de su familia le acompañó para dar impresión de normalidad, de que no sucedía nada, pero sí sucedía, porque le estaban operando supuestamente de un cáncer, o eso se temía”. La misma política se siguió en el momento de dar el alta a Don Juan Carlos. “Se cometió un error para demostrar que el Rey era un superhombre. Se le dio el alta demasiado pronto. No era necesario, todo el mundo sabe que eso era muy delicado”. Y eso que el propio monarca se encargó de salir al paso durante su mensaje navideño, cuando aseguró que seguiría en su puesto porque era su obligación y su pasión. Peñafiel no se olvida de la cuasi secreta intervención del Rey en 1985 en la que, según el periodista, se le extirpó un testículo. Precisamente es éste uno de los puntos más polémicos del libro, pues desvela el robo del expediente médico del Monarca y publica los inéditos documentos de la denuncia.

EL ERROR AUTONÓMICO, SEGÚN BONO.- El presidente del Congreso, José Bono, afirmó este lunes, según relató Público, que la decisión de que todas las comunidades autónomas tuvieran el mismo nivel de autonomía, lo que se conoció como "café para todos" "no fue una solución" y sí un "error", que aún se está a tiempo de corregir "en la medida en que es corregible". José Bono, en la presentación del libro del senador del PNV José Anasagasti, Extraños en Madrid, se ha referido al modelo autonómico y al "error" que, en su opinión, supuso el pretender querer "ser exacta y milimétricamente no diferenciables". Esto se hizo, según ha explicado, para contentar al Ejército al acabar la dictadura, que amenazaba con sublevarse si la Constitución reconocía el derecho de autogobierno del País Vasco y Cataluña. Para evitarlo, según relató, se dijo a las Fuerzas Armadas que las competencias que iban a recibir esas comunidades históricas eran las mismas que el resto de los territorios, y entonces fue cuando "se inventaron", ha recordado, la fórmula "café para todos". Si entonces fue "una salida", según Bono, "probablemente no fue una solución" haber querido copiar "milimétricamente" a quienes habían sido los "abanderados" y reclamaban históricamente la autonomía. Y cree que esto se debería corregir pese a que ha reconocido que comunidades como Castilla La Mancha, que él presidió durante 21 años, han logrado, gracias a este modelo, superar "un bache histórico" que parecía insuperable y de ello, ha dicho sentirse "muy orgulloso". No obstante, ha incidido, en que a Castilla La Mancha y a otras comunidades la autonomía les sobrevino para "desmerecer" ante el Ejército franquista a las comunidades que históricamente habían reclamado el autogobierno. También de "distribución territorial" habla el senador Iñaqui Anasagasti en su libro, que repasa sus 25 años como parlamentario en Madrid. Dice de las CCAA que es una distribución, según señaló en este acto, que "se tenía que haber hecho mejor" en estos años. Otro asunto que ha tocado durante su intervención ha sido el uso de las lenguas cooficiales por primera vez en el Pleno del Senado, la semana pasada, y la "ridiculización" que, en su opinión, se ha hecho de ello, lo cual, ha apuntado, le hizo sentirse "extraño" en la capital, en alusión al título de su libro. Sobre la utilización de los idiomas propios en la sesión plenaria, el portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, que igualmente ha participado en la presentación del libro, ha lamentado que haya mucha gente que "no ha entendido" que la diversidad es también "un patrimonio común". Entre los asistentes a este acto, estaban también el que será el nuevo delegado de la Generalitat en Madrid, Jordi Casas, el portavoz del PNV en la Cámara Baja, Josu Erkoreka, y otros diputados y senadores de ese grupo, de CiU y de ERC.

LAS CIFRAS DE PÚBLICO.- Según las cuentas del diario Público, este diario alcanzó una difusión media de 87.227 ejemplares diarios durante el año 2010, lo que representa un 17,7% más que en 2009, según datos de OJD conocidos hoy. Público es el único diario de información general y ámbito nacional que mejoró su difusión en 2010: El País cayó un 5,5%; El Mundo, un 4,7%; ABC, un 2,8%, y La Razón, un 4,7%. El diario de Mediapubli, sigue diciendo Público, también es el único diario de información general y ámbito nacional que mejoró su venta al número durante 2010, al alcanzar los 48.096 ejemplares diarios, un 1,7% más que en el año anterior. El País cayó un 12,3%; El Mundo, un 6,7%; ABC, un 2,1%, y La Razón, un 7,3%.